Uno de los grandes desafíos de quien se prepara para concursos públicos es lidiar con la enorme cantidad de contenido que se debe estudiar. Desde leyes, fórmulas y fechas, hasta normas específicas de cada órgano. Memorizar tanta información puede parecer una tarea imposible, pero con las técnicas correctas, es totalmente alcanzable. A continuación, te presento las mejores técnicas de memorización que puedes aplicar desde hoy para optimizar tu rendimiento.
¿Por qué es importante trabajar la memoria?
La memorización no es solo “decorar datos”. Cuando se hace bien, implica comprensión, asociación y repetición efectiva. Memorizar con inteligencia te permite:
- Ganar agilidad en las respuestas
- Aumentar la confianza en la hora de la prueba
- Tener una base sólida para materias futuras
- Reducir el tiempo de revisión
La buena noticia es que la memoria puede entrenarse y mejorar con el uso continuo de técnicas.
Técnica 1: Repetición espaciada (Spaced Repetition)
Esta es una de las técnicas más efectivas según la ciencia cognitiva. Consiste en revisar un contenido varias veces, pero con intervalos de tiempo crecientes.
Por ejemplo:
- Día 1: estudias un tema nuevo
- Día 3: primera revisión
- Día 7: segunda revisión
- Día 14: tercera revisión
- Día 30: revisión final
Esto fortalece la memoria a largo plazo y evita el olvido progresivo.
Herramientas recomendadas:
- Anki (aplicación de tarjetas con repetición espaciada)
- Quizlet (plataforma para crear tarjetas de memoria)
Técnica 2: Método de loci (Palacio de la memoria)
Este método es usado desde la antigua Grecia. Se basa en asociar información con lugares físicos familiares para ti, como tu casa o tu trayecto diario.
Por ejemplo, si necesitas memorizar 5 artículos de una ley, puedes imaginar que cada artículo está representado en un lugar de tu casa:
- Entrada: artículo 1
- Cocina: artículo 2
- Baño: artículo 3
- Sala: artículo 4
- Dormitorio: artículo 5
Caminar mentalmente por estos lugares ayuda a recuperar la información con más facilidad.
Técnica 3: Asociación de ideas y visualización
Tu cerebro recuerda mejor cuando conectas un dato nuevo con una imagen, emoción o historia. Usa tu creatividad:
- Asocia términos jurídicos con situaciones cotidianas
- Usa colores, dibujos o diagramas para visualizar conceptos
- Crea una historia absurda con palabras clave
Cuanto más absurda o divertida sea la asociación, más fácil será recordarla.
Técnica 4: Técnica Feynman
Consiste en explicar un concepto con tus propias palabras, como si enseñaras a un niño. Si logras hacerlo, es porque realmente lo entendiste y lo memorizaste bien.
Cómo aplicarla:
- Estudia el contenido normalmente
- Anota en un papel o graba tu explicación del tema
- Identifica qué partes no logras explicar bien
- Vuelve al material y refuerza ese punto
- Repite el proceso hasta lograr una explicación fluida y simple
Esta técnica también fortalece la comprensión profunda, no solo la memorización mecánica.
Técnica 5: Mapas mentales
Los mapas mentales son diagramas visuales que organizan la información de forma jerárquica y conectada. Son excelentes para revisar y recordar grandes bloques de contenido.
Beneficios:
- Ayudan a ver la estructura general del tema
- Refuerzan conexiones entre ideas
- Estimulan el pensamiento visual y creativo
Usa lápices de colores, imágenes y símbolos para potenciar el efecto visual y la retención.
Técnica 6: Enseñar a otros
Cuando enseñas un contenido, tu cerebro lo procesa más profundamente. Esto refuerza el aprendizaje y hace que el recuerdo sea más duradero.
No necesitas tener un alumno formal. Puedes:
- Explicar a un amigo o familiar
- Grabar videos cortos con tu celular
- Simular una clase frente al espejo
Lo importante es expresar el contenido de forma clara y organizada.
Técnica 7: Flashcards (tarjetas de memoria)
Las tarjetas de memoria son una forma clásica y eficaz de repasar. En un lado colocas la pregunta o palabra clave, y en el otro la respuesta o definición.
Consejos para usar flashcards:
- Haz tarjetas simples y objetivas
- Usa colores diferentes para materias distintas
- Revisa diariamente, aplicando la repetición espaciada
También puedes usar tarjetas digitales para tener acceso desde tu celular.
Técnica 8: Técnica Pomodoro combinada con revisión
La Técnica Pomodoro consiste en estudiar durante 25 minutos y hacer una pausa de 5. Después de 4 ciclos, haces una pausa más larga.
Puedes combinar esta técnica con la revisión:
- Primer Pomodoro: estudio nuevo
- Segundo Pomodoro: ejercicios prácticos
- Tercer Pomodoro: revisión de tarjetas
- Cuarto Pomodoro: repaso de mapa mental
Así, mantienes tu mente activa y evitas la sobrecarga.
Técnica 9: Escritura activa
Escribir a mano lo que estás aprendiendo activa áreas del cerebro relacionadas con la memoria y mejora la retención.
Recomendaciones:
- No copies pasivamente; escribe resúmenes con tus palabras
- Crea esquemas, listas, cronogramas
- Reescribe las partes más importantes varias veces
Este esfuerzo de traducir el contenido en palabras propias facilita el recuerdo.
Técnica 10: Audios de repaso
Graba tu propia voz leyendo resúmenes, leyes o explicaciones, y escucha durante momentos del día como:
- Caminatas
- Esperas en filas
- Antes de dormir
Esto te permite repasar sin necesidad de estar frente al material y transforma momentos ociosos en tiempo productivo.
Cierre: La clave está en el entrenamiento
Memorizar grandes volúmenes de contenido no es una cuestión de tener “buena memoria”, sino de usar las técnicas correctas con constancia. Escoge las que mejor se adapten a tu estilo y combínalas para obtener mejores resultados.
Recuerda: la práctica diaria transforma la dificultad en rutina. Cuanto más te acostumbres a usar estas herramientas, más fácil será absorber y retener información. ¡Tu cerebro es capaz de mucho más de lo que imaginas!